Forasteras

¿Alguna vez te has preguntado qué es lo que nos motiva, como mujeres, a movernos?

Texto: Camila Rikli
Ph: Tere Pérez
@forasterastravel

La palabra “mover” tiene un significado especial y versátil. Literalmente, implica causar un cambio en la posición o ubicación de algo o alguien, llevándolo de un lugar a otro. Pero también, de manera figurada, se refiere a la capacidad de conmover o emocionar, provocando una reacción emocional profunda en alguien.

Es interesante notar cómo el concepto de "mover" se ha mantenido relevante a lo largo de los siglos y cómo sigue siendo una parte fundamental de nuestra comunicación y comprensión del mundo que nos rodea. Es uno de esos verbos que trascienden culturas y lenguas, uniendo a la humanidad en su necesidad de expresar el acto primordial de movimiento y cambio.

El movimiento es una fuerza que impulsa nuestra existencia, una expresión intrínseca que nos invita a explorar el mundo que nos rodea. Moverse, va más allá de simplemente cambiar de lugar físico; es una metáfora poderosa que abarca el crecimiento, la evolución, el desarrollo y la búsqueda constante de experiencias nuevas y emocionantes.

Es así como, producto de esa búsqueda por lo desconocido, nos convertimos en Forasteras, visitando tierras extranjeras, que nos iban y nos van desafiando a expandir nuestros horizontes y a salir de nuestra zona de confort.

Somos Tere Pérez y Camila Rikli, dos mujeres, pero principalmente dos grandes amigas, unidas y embarcadas en este increíble sueño de @forasterastravel.

Nuestro proyecto nos ha llevado a explorar el mundo, compartiendo cada una de nuestras inolvidables aventuras, a través de instancias tanto análogas como digitales. Nuestra amistad se remonta a la infancia, y aunque la vida nos separó por un tiempo, el destino nos reunió hace ya más de 15 años. “Somos compañeras de alma, y nos hemos ido complementando a la perfección en esta travesía."

Después de movernos por el mundo durante un largo tiempo, logramos encontrar un camino que nos permitió hacer de nuestra pasión por viajar, una forma y un estilo de vida, y estamos decididas a compartir, humilde y genuinamente, todas las maravillas que hemos descubierto en el camino, todas las experiencias que hemos vivido, y lo mejor, toda la gente única que hemos conocido.

Siempre hemos sido almas nómadas y estamos en busca constante de movimiento en todo lo que hacemos, ya sea en nuestra vida personal, familiar o profesional. Dejamos atrás la comodidad de lo conocido para adentrarnos en busca de experiencias nuevas; los viajes de aventura nos han llevado a confrontar miedos y ansiedades. A medida que nos movemos más allá de lo “seguro”, enfrentamos la incertidumbre y la vulnerabilidad y convivimos con ella, porque lo maravilloso es seguir moviéndose a pesar de todo. Y así, al superar cada desafío, vamos desarrollando una mayor confianza en nosotras mismas y en nuestras habilidades para adaptarnos.

Lo que nos hace diferentes, es nuestra capacidad para insertarnos en cada lugar que visitamos y vivirlo al máximo. No somos meras espectadoras, sino participantes activas de cada experiencia. Nos sumergimos en festivales locales, aprendemos tradiciones ancestrales, exploramos los rincones menos conocidos y nos conectamos con personas que nos abren las puertas de sus hogares y de sus vidas. Nuestro enfoque no se limita sólo a lo visual, sino que buscamos experimentar y luego transmitir emociones, conexiones y sensaciones a través de nuestra narrativa y fotografías.

Como “Forasteras”, queremos que nuestros lectores sientan que nos acompañan en cada viaje. A través de nuestro relatos y fotografías, los invitamos a ser parte de nuestra experiencia, a sumergirse en cada aventura y a descubrir el mundo desde una perspectiva diferente. Queremos motivarlos a explorar, y a despertar su espíritu aventurero.

Estamos felices y honradas de pertenecer a esta comunidad de “Mujeres en Movimiento” de Mali. Una comunidad de almas afines, en la que se fomentan los valores de respeto, sororidad, empatía y cuidado hacia nuestro entorno y hacia los demás. Las invitamos a todas a unirse a nosotras, a subir cada volcán y a nadar en cada océano, no sólo físicamente, sino también en el sentido metafórico de explorar y superar desafíos personales, crecer como personas y dejar una huella positiva en el mundo.

No siempre es necesario viajar para moverse. No siempre es necesario explorar para experimentar el movimiento y las aventuras. La vida misma es una sucesión de movimientos y cambios constantes. Cada decisión que tomamos, cada paso que damos hacia lo desconocido, nos lleva a un viaje interior que moldea nuestra identidad y nos forma y transforma en lo que somos y vamos siendo.

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